WILLEMSTAD. – El Barco Seven-Seas llegó a Curaçao ayer para transportar la ayuda humanitaria a Venezuela. Pero el Primer Ministro Eugene Rhuggenaath dijo que el barco no puede salir si no tiene garantías y si la situación de Venezuela no está a salvo para que llegue a ese país. También debe haber una infraestructura lista con todos los artículos que quedaran distribuidos en Venezuela. Esto es lo que Extra comprendió del Primer Ministro Eugene Rhuggennaath. Estas también son las palabras que acordó el Gobierno dentro del Parlamento, en base a la moción que se celebró. Y esa garantía no está, a pesar de que el presidente Guaidó hizo la petición. Este barco vino gracias a una iniciativa privada para ir con los productos para Venezuela.
El Barco ahora está en medio de una controversia ya que ni el Primer Ministro ni la Aduana, está dando el OK para que pueda zarpar lleno con los productos de la ayuda humanitaria. En conversaciones con el Primer Ministro Rhuggenaath, él enfatizó que sigue las condiciones que el Parlamento y la moción han establecido, referente a que deben haber garantías para que los productos de ayuda humanitaria puedan llegar a Venezuela. Ni el Gobierno ni la Aduana permitirá al barco salir para Venezuela con la ayuda humanitaria adentro sin cumplir estas condiciones. El señaló que los productos para la ayuda humanitaria pueden llegar a Curaçao y aquí quedará almacenada, pero Curaçao no puede funcionar como centro neurálgico.
También vía del Embajador de Venezuela se realizó una apelación para dejar entrar los productos, pero hasta ayer no habían obtenido una respuesta oficial para que esto sucediera. El Primer Ministro cree que la mejor cosa que puede suceder; es que las partes encuentren otra alternativa, por cuanto se trata de una ayuda humanitaria que requiere ser entregada y que finalmente debe llegar al pueblo venezolano.
Respecto al día de hoy en el cual se desea que entre la ayuda humanitaria que está lista entre otras en Cúcuta, el Primer Ministro dijo a EXTRA, que espera que el sano juicio prevalezca en este caso, se coloquen las manos en el corazón y dejen que los productos entren y así poder ayudar al pueblo venezolano. Hoy es un día de esperanza, así lo dijo el Primer Ministro Eugene Rhuggenaath.
