WILLEMSTAD.- Esta lunes y ayer diferentes socios de la cadena judicial como Aduana, Guarda costa, Policía y Departamento de Inspección del Puerto y Seguridad realizaron una operación llamada “Operatie Lockdown”. Esta es una operación combinada de control severo sobre la actividad marítima. Pues se trata de todos los movimientos, de entrada y salida del agua.
Este control tomó lugar en kleinewerf y también en el área de Spaanse Water. Se controló a una cantidad de 13 botes y barcos incluyendo todos los barcos de frutas y además los botes que se encontraban atracados sobre el agua. Igualmente se puso especial atención en vigilar posibles botes que realizan paseos comerciales hacia Klein Curaçao verificando si éstos disponen de un permiso válido.
Durante el control, las autoridades se toparon con un bote flotando a la deriva. Este bote, suponen las autoridades, que desconocidos le robaron su motor y después dejaron al bote flotando. Una persona atenta miró el bote y llamó al 913. Guardacostas remolcaron el bote y fueron con el mismo a tierra para entregárselo a su dueño.
Aparte de esto, hasta éste momento no se ha constatado nada ilegal durante el control, pero en el momento en que ésto ocurra, entregarán el caso en manos del Cuerpo de Policía.
