WILLEMSTAD.- Los precios de los cuartos de hoteles no cuestan dobles, sino triples relacionados con el festival de jazz de este año. Los organizadores no pueden hacer nada este año. Es cierto que la demanda aumenta los precios. El único problema es que por lo general aquellos que quedan en el área, no contribuyen con este magno-evento de fin de agosto, pero si se aprovechan del mismo.
En el pasado ya se hicieron algunos remarques respecto a los precios que suben extremadamente en el área donde el festival se celebra en Piscadera. Las mismas facilidades no están en el top en el sentido que éstos tienen 4 y 5 estrellas, lo que le da valor al precio que cobran. En esa ocasión también se ha dicho que estos hoteles sacan provecho de ese período, que por lo general es un período quieto. Se trata de atender este asunto, pero no ha habido éxito. Este año tomando en cuenta que la cartelera de presentaciones es más impactante y considerada la más atractiva en comparación con los últimos años, el interés es enorme. Esto pone que la misma presión para conseguir una habitación cerca del evento aumente y también los precios suban hasta el “cielo”. Fuentes de la organización dieron a conocer que no pueden hacer nada en contra de esta situación. Un aspecto más que juega un rol, es que el Marriot no abre antes que el fin de agosto lo que seguramente también influye más, ya que 300 habitaciones no estarán listas a tiempo.
El interés este año es enorme en los diferentes mercados donde se promueve el evento. La cartelera se considera como se indicó excepcional; y aún faltan artistas y grupos grandes por anunciarse. Con algunos ya se firmaron los contratos correspondientes, con los otros se ha anticipado que las contrataciones estarán listas la próxima semana.
Los mercados dentro de los cuales hay mayor interés, son los mercados del Caribe Holandés, como Aruba, Bonaire y San Martín. Otros mercados en acción de movimiento sería Colombia, que tiene ahora más vuelos, Brasil, Surinam y Holanda. Desde Estados Unidos también hay un interés creciente para un festival que como se proyectan las cosas, parecerá que batirá records de audiencia.
