WILLEMSTAD.- Este sábado pasado, el sr Bernhard “Ben” Whiteman, destacó un aspecto delicado y es que después de analizar las actitudes de algunos líderes políticos, él no puede quitarse la impresión de que algunos políticos son comprados o éstos se vendieron a sí mismos.
Por eso su mensaje a los lideres sindicales, es que ellos deben ser ante todo patriótico, en razón de que el sindicalismo es uno de los cargos más nobles y necesarias del mundo. Ahora más que nunca, a pesar de los desarrollos, se puede observar que las personas se convierten en monstruos. Ellos pueden acabarte y más allá, si ellos pueden dejan también tus planes barridos y aplastados, no dudan en hacerlo. Whiteman añadió: Por esto el sindicalismo es algo sagrado, y obviamente mucho más para la clase trabajadora.
“Cuando eres sindicalista, los intereses de los trabajadores están en primer lugar y en segundo lugar los intereses del país, es decir, el interés general. Esto significa que cuando un sindicalista habla con los trabajadores en contra de sus propios intereses como trabajador y se refiere a interés general, hay algo erróneo. Dios sabe a cuál interés estas sirviendo”, Whiteman ha dicho.
Un país que tiene sus reglas en orden, es un país en el cual el interés general está bien servido. Los intereses de los trabajadores deben estar, siempre y ante todo en primer lugar, ya que ellos ejercen un empleo digno para criar y dar sustento a sus familias dignamente.
Pero aquí actualmente se observa a lideres sindicales que se convierten en voceros del Gobierno y en vez de prepararse para salvaguardar los cupos de trabajo, más bien preparan a los trabajadores para que se vayan a casa, es decir los están contrariamente preparando para perder sus trabajos.
Whiteman explicó que existen líderes que incluso de una forma estratégica aguardan hasta el último momento para entregar sus noticias. Esto no es sindicalismo, Whiteman señaló
Los sindicalistas que están atendiendo “pequeñeces” con los Ministros y salen como voceros del Gobierno, mientras todo el mundo se queda quieto y en cómplice silencio.
